Energía Nuclear. Gestión segura de combustible gastado

Central Nuclear de Santa María de Garoña

La estrategia para la gestión del combustible gastado en España pretende, ante todo, garantizar la seguridad y la protección de las personas y del medio ambiente. En una primera fase, está previsto el almacenamiento del combustible “en seco” (sin sistema activo de refrigeración), en el interior de una serie de contenedores diseñados para tal fin, ubicados en un emplazamiento específico dentro de cada central nuclear. Este lugar es llamado Almacén Temporal Individualizado (ATI), y en él permanecerá el combustible hasta su posterior traslado al Almacén Temporal Centralizado (ATC), una vez entre en servicio para albergar el combustible procedente de todas las centrales españolas.

En este contexto, el combustible gastado de la central nuclear de Santa María de Garoña (Burgos, España) se encuentra almacenado actualmente en la piscina de la planta. En breve, dicho combustible será trasladado al ATI recién construido en la central, siendo depositado en una serie de contenedores los cuales han sido diseñados, licenciados y fabricados por ENSA. Estas labores se enmarcarán dentro de las fases previas del desmantelamiento de la central, iniciadas a partir del fin del periodo de explotación de la planta el pasado agosto.

El proyecto global comenzó cuando ENRESA, entidad pública española encargada de la gestión de los residuos radiactivos, cedió la gestión de la creación del ATI a NUCLENOR, empresa propietaria de la central, la cual, en 2012 adjudicó a IDOM el diseño y la asistencia técnica para la construcción de dicha instalación. Posteriormente, en el año 2014 se recibió la aprobación por parte del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) para su ejecución y en junio de 2016, ENRESA adjudicó las obras para su construcción a OHL. A lo largo del pasado mes de octubre finalizaron los trabajos, y actualmente la instalación se encuentra a la espera de albergar las primeras unidades de contenedores.

noviembre 15, 2017

Energía