Crecimiento urbano más humano y sostenible en Ciudad de Guatemala

Guatemala

Durante más de 100 años, la finca La Pedrera, en la ciudad de Guatemala, fue utilizada como cantera de áridos y lugar de producción de cemento. Situada en la zona norte de la capital, es una de las últimas grandes áreas urbanas – con 148 hectáreas -, que está pendiente de su adecuación al entorno urbano y de una reconversión en favor de la mejora de la calidad de vida de los habitantes de su entorno y la ciudad.
IDOM se ha ocupado de realizar el Master Plan que integra el paisaje espectacular de la cantera en un proyecto que crea un nuevo foco de centralidad urbana en la Gran Área Metropolitana de la Ciudad de Guatemala.

Concebido para que el impacto ambiental y la huella de CO₂ sean mínimos

La variedad de usos y de tipologías de edificación ha dado lugar a un espacio urbano altamente atractivo que representa un cambio en el desarrollo urbano de Guatemala, hacia un modelo más humano y sostenible.

Se ha planteado edificar más de 4.000 viviendas en un ambiente propicio para vivir, trabajar y disfrutar del tiempo libre, que incluye un Palacio de Congresos, una Ciudad del Conocimiento, un Hospital, un Museo de Cultura Maya, un hotel, un centro de negocios con centro comercial, un estadio de fútbol y una Estación multimodal de transportes. Todo ello complementado con equipamientos comunitarios que se conectan mediante la red de espacios públicos y que se integran con espacios verdes de gran interés.

El proyecto se ha concebido para que el impacto ambiental y la huella de CO₂ sean mínimos. La gestión de recursos naturales se ha optimizado mediante una urbanización eficiente, que incluye sistemas de gestión inteligente del agua, así como la generación de energía a través de renovables – 100% de la demanda energética estará cubierta con fuentes alternativas asociadas al diseño bioclimático propuesto.

Se ha apostado por un modelo de eco-movilidad innovador en la región, que privilegia al peatón, la bicicleta y el transporte público en los desplazamientos de ámbito local y con los barrios colindantes. El diseño fomenta el crecimiento urbano compacto, con espacios públicos atractivos y una oferta de transporte público eficiente (Transmetro) que favorece aún más la integración con la ciudad construida. Se pretende que el impacto urbano sobre los barrios colindantes sea muy positivo, al ampliarse la oferta de equipamientos, de oportunidades de empleo local y de espacios de ocio.

Además, cabe destacar la integración paisajística de la cantera, creando un balcón mirador privilegiado hacia las montañas del norte, una laguna y un gran parque, corazón de la nueva centralidad.

Nuevas ciudades